THE CAMEL CAMP****

El sitio elegido por Dinesh para el almuerzo fue la sorpresa de la mañana, pues en el programa lo que teníamos era un almuerzo tardío en Jaisalmer a más de 5 horas de autobús de aquí. Salimos del templo (un día, llorona) hinduista y nos metimos en el tatabús, que fue bajando hasta parar en una hondonada. Allí paró y aparcó.

Se nos dio la opción de tomar todoterrenos que nos esperaban dispuestos dando un rodeo o de subir andando por una enorme duna de mas de 100 metros de altura, que nos quedaba al frente. En la parte mas alta de la duna se veía una pequeña y fina murallita de arenisca roja oscura, de contorno superior ondulado.

La mayoría optamos por utilizar nuestros miembros (inferiores). Los pies se iban hundiendo en la fina y rubia arena, pero el reto de hacerlo se convertía en una gratificante experiencia. Nuestro caminar iba acompañado no sólo por un sol de justicia sino por la chiquillada del pueblo, que nos jaleaba, nos miraba y nos preguntaba no sólo nuestros nombres y nuestro origen sino de donde veníamos y a donde íbamos a ir.

Tras efectuar la escalada nos encontramos un gran portalón abierto en cuyo interior mostraba un bonito jardín indio, una escalera de piedra ascendente desembocaba en un idílico prado de ray grass inglés en cuyo centro había una enorme piscina. Un poco mas adelante un gran bar y grandes mesas preparadas. Al lado de la barra un gran equipo de música y unos militares que al parecer en la tarde noche iban a celebrar una fiesta.

Como era una sorpresa ninguno de los veinte había traído bañador, y la presencia militar desaconsejaba el despelote. Así que empezamos a pedir cervezas heladas como locos. Una gran mesa para 22 y una mayestática comida india espaisi y no espaisi nos recompensó del esfuerzo. ¡Ya dormiríamos en el tatabús! ¡El camino va a ser largo!

Las vistas desde el Camel Camp son realmente maravillosas pues se domina el pueblo con sus templos, y en especial, al frente, el hinduista de Sachiyamata. Los habitáculos que ofrecen en el camel Camp son tiendas de campaña de distintas calidades, algunas son verdaderas suites luxuriousas con baño  privado. Ofrecen safaris en camello por toda la zona.